TENDENCIAS CLAVE PARA LA (TECNO)TRANSFORMACIÓN DIGITAL

TENDENCIAS CLAVE PARA LA (TECNO)TRANSFORMACIÓN DIGITAL

Tendencias mejor posicionadas en un mundo post-covid

Creo que en este artículo no vamos a descubrir la rueda y estoy seguro de que ya habrás oído hablar de todas o de la mayoría de las tendencias de las que vamos a hablar, pero conviene no perderlas de vista, especialmente en un mundo tan cambiante y tremendamente incierto, como el que nos ha tocado vivir.

La transformación digital, sin ninguna duda, resulta, además de imprescindible, un proceso que está lleno de retos, de incertidumbres y, por supuesto, de oportunidades. Asimismo, las circunstancias generadas por el COVID-19 ha puesto de manifiesto la importancia de esta transformación digital, gracias a la cual muchas empresas han podido adaptarse a las condiciones impuestas por la pandemia sin necesidad de interrumpir sus actividades e, incluso en algunos casos, generar nuevas líneas de negocio.

Este proceso debe venir acompañado, como ya dije en el número 0 de esta revista, de una reflexión estratégica profunda que derivará en una adecuada toma de decisiones que deben tener en cuenta aspectos tales como la privacidad, la ética, la captura y utilización de datos, la elección de correctos socios tecnológicos, etc. Tal como introducía en aquel artículo, la pandemia ha sido el gran impulsor de la transformación digital, así como también ha provocado el avance y la consolidación de ciertas tendencias que ya estaban aquí antes. Desde luego, no podemos olvidar que la enfermedad ha provocado que muchas empresas hayan desaparecido, que otras hayan tenido que suspender o reducir su actividad, afectando en mayor o menor medida a sus cifras de negocio, pero, a su vez, ha acelerado el desarrollo de determinadas tecnologías emergentes. Y esto toma especial relevancia en aquellas innovaciones que permiten reducir el contacto físico, automatizar procesos e incrementar la productividad en un contexto de distanciamiento social.

Inteligencia artificial (IA). 

Las herramientas IA son capaces de analizar ingentes cantidades de datos que identifican patrones, lo que permite, entre muchas otras cosas, la toma automatizada de decisiones, la predicción de comportamientos humanos o el reconocimiento de imágenes y de voz. Los sistemas de inteligencia artificial aprenden y se adaptan de forma constante. Estas capacidades serán extremadamente valiosas a medida que las empresas empiecen a afrontar y a adaptarse a la nueva normalidad cuando dejemos la pandemia definitivamente atrás.

Pero, también debemos ser conscientes de la importancia de que la inteligencia artificial esté dotada de una ética, o código de valores, que condicione, a nuestra imagen y semejanza, la esencia de sus actos.

Sobre este punto, algún día os contaré algo sobre la IA aplicada al mundo de la programación que, al menos a mí, me provoca escalofríos.

Ciberseguridad

La ciberseguridad es y si no lo es, debería serlo ya, un aspecto crítico para muchas organizaciones, ya que avanzamos a la interconexión completa hacia adentro y hacia afuera, cada vez tenemos más elementos IoT (justo la siguiente entrada del artículo) conectados a nuestras redes, nos conectamos a otras organizaciones vía internet y, desde luego, no debemos ni podemos olvidar aquellas organizaciones cuyos procesos de negocio dependen en gran medida de la gestión de datos, etc. Los ciberataques son una amenaza real que pueden afectar a cualquiera.

IoT (Internet de las Cosas) evolucionando hacia IoE (Internet de Todo)

La definición de IoT podría ser la agrupación e interconexión de dispositivos y objetos a través de una red (privada o Internet), dónde todos ellos podrían ser visibles e interaccionar. Cualquier cosa que nos podamos imaginar podría ser conectada a internet e interaccionar sin necesidad de la intervención humana, el objetivo por tanto es una interacción de máquina a máquina, o lo que se conoce como una interacción M2M (machine to machine) o dispositivos M2M.

IoT es usado en muchas plantas de producción dónde los dispositivos y sensores conectados a la red permiten analizar los datos y generar alarmas y mensajes que son enviados a los distintos usuarios para que tomen las acciones necesarias o incluso iniciar protocolos de actuación de forma automática, sin interacción humana, para corregir o tratar dichas alarmas.

Términos muy relacionados con IoT pueden ser «Smart Cities» y «Smart Buildings» dónde se utilizan dispositivos de IoT para mejorar el control del tráfico, el control de los suministros de agua y calefacción en un edificio, el control del transporte público, etc.

Por su parte, la internet de todo (internet of everything, IoE) es un concepto que extiende el énfasis de la IoT en las comunicaciones de máquina a máquina (M2M) para describir un sistema más complejo que también abarca personas y procesos.

El concepto de internet de todo podría definirse como «la conexión inteligente de personas, procesos, datos y cosas». El concepto IoE incluye, además de las comunicaciones M2M, las interacciones de máquina a persona (M2P) y las de persona a persona (P2P) asistida por tecnología.

El IoT/IoE va a permitir el despegue de las tecnologías de “edge computing”, o computación perimetral, que permitirán ahorrar ancho de banda y disfrutar de servicios de baja latencia al aproximar los centros de almacenamiento y procesamiento de datos a los nodos de acción.

VR/AR (Realidad Virtual/Realidad Aumentada)-Metaverso

La pandemia ha disparado el número de personas que han comenzado a utilizar equipos de realidad virtual en todo tipo de aplicaciones: videojuegos, turismo virtual, programas de entretenimiento online, etc. En un marco de confinamiento, ha sido mucha la gente que ha optado por recurrir a plataformas sociales de realidad virtual para cubrir sus necesidades de interacción social.

Las empresas también han estado utilizando plataformas de realidad virtual para probar diferentes modalidades de formación, reuniones, conferencias, colaboración e interacción con sus empleados.

Y el futuro de estas tecnologías parece que se llama metaverso. Actualmente ya existen metaversos para empresas donde se permiten simular posibles mejoras de procesos productivos, por ejemplo, BMW ha diseñado en este entorno las fábricas en las que producirá su coche eléctrico o Microsoft está testando una oficina virtual en la que se pueda trabajar de forma remota, pero con un grado de realismo/interacción superior a las videoconferencias actuales.

Nos quedan muchas otras tendencias que valorar y tener en cuenta, como la computación cuántica y la seguridad post cuántica, que si antes hablaba de que se me ponían los pelos de punta con la IA, con esto ….., también deberíamos valorar el 5G, aunque ya se empieza a hablar de experimentos 6G (¡esto cada vez corre más!), desde luego el blockchain con una aplicación clara en los smart contracts, la computación en la nube y las arquitecturas muti cloud, etc., etc., etc….

En fin, nuestro mundo está cambiando y cada vez más deprisa y debemos estar atentos a las tendencias que se consolidan para mantener nuestras organizaciones vivas y con capacidad de adaptación que permita posibilidades de éxito, pero, insisto, con cabeza y teniendo clara nuestra estrategia y eligiendo correctamente a los aliados que nos acompañen en este apasionante camino que nos queda por recorrer.

Hasta nuestro siguiente encuentro.

Autor. Juan Jesús Urbizu

Publicado en: https://tecnologiaysentidocomun.com/ipages/flipbook/revista-stakeholders-news-st003-febrero-2022

640 426 Juan Jesús Urbizu